El cocker spaniel inglés ha sido un perro elegido frecuentemente por muchas familias alrededor del mundo. Es un perro que suele ser inteligente, juguetón y simpático. Si bien el cocker solía usarse como perro de casa, hoy en día resulta un excelente perro de compañía para familias de todos los tipos. Si te interesa saber más sobre el cocker spaniel inglés, no te pierdas esta nota de Filosofía Animal.
Características del cocker spaniel inglés
Esperanza de vida: De 12 a 15 años
Origen: Inglaterra
Colores: Negro, Azul ruano, Negro y canela, Naranja ruano
Altura: Hembra: 36–41 cm, Macho: 38–43 cm
Peso: Hembra: 12–15 kg, Macho: 13–16 kg
Origen del cocker spaniel inglés
La raza de perros cocker spaniel fue en su tiempo separada del Field y el springer spaniel, después de la formación del Kennel Club. El nombre deriva del francés antiguo, «spaigneul», que significa «perro español» ya que la raza original provenía de España, país en el que se utilizaba como perro cazador y cobrador. Los cocker spaniel llegaron a Inglaterra de la mano junto a tutores Españoles. Durante sus orígenes, esta raza ha estado muy marcada por la caza. Aunque antiguamente se usaban para diferentes tipos de presa según su tamaño, no se hacía distinción por razas. En una misma camada de spaniel de tierra podrían nacer perros grandes (más usados para cazar mamíferos) y perros pequeños (más usados para cazar aves). Por este motivo es que en la antigüedad los perros que hoy conocemos como cocker spaniel, spaniel de campo, springer spaniel y Sussex spaniel conformaban un solo grupo. Fue recién a finales del siglo XIX que se separaron estas razas y se reconoció oficialmente por primera vez al cocker spaniel. Su principal función como perro de caza era, y sigue siendo, la de levantar la becada o gallinuela. Este pequeño perro se hizo muy popular en Gran Bretaña y el resto de Europa. Luego fue exportado a Estados Unidos de América donde también logró mucha popularidad, aunque los criadores americanos decidieron modificar la raza para conseguir una apariencia algo diferente. Los cinófilos británicos se opusieron a los cambios realizados por los americanos y decidieron prohibir los cruces entre la raza original y la variedad americana. Así se separaron las dos variedades en dos razas distintas, el cocker spaniel americano y el cocker spaniel inglés, distinción que se mantiene hasta hoy en día. El cocker americano llegó a ser sumamente popular en su país, dejando en segundo plano a su pariente inglés. No obstante, la versión americana de la raza es poco conocida en el resto del mundo. En la actualidad podemos descubrir pequeñas diferencias entre la raza destinada al «trabajo» y la de «belleza», como ocurre con muchas otras razas como el pastor alemán o el border collie.
Características físicas del cocker spaniel
El cocker spaniel inglés es un perro con un cuerpo compacto, deportivo y atlético.. La nariz es ancha y el hocico es más bien cuadrado. Los ojos son marrones, excepto en perros con pelaje total o parcialmente de color hígado, en los que los ojos pueden ser color avellana. Las orejas son largas, de inserción baja y colgantes lo cual les da una apariencia realmente adorables, sobretodo cuando son cachorros. La cola es de inserción baja, levemente curvada y de longitud moderada. En la antiguedad se amputaba para reducir las heridas durante las jornadas de caza. Sin embargo, hoy en día la mayoría de estos perros son compañeros de la familia, por lo que no hay motivo para esa práctica por lo cual afortunadamente esta práctica es cada vez menos frecuente. El pelaje es liso, largo, y sedoso. El estándar de la raza acepta cuatro variedades de color:
- Colores sólidos. Negro, rojo, dorado, hígado, negro y fuego, hígado y fuego. Pueden presentar una pequeña marca blanca en el pecho.
- Particolores. Negro y blanco, naranja y blanco, hígado y blanco, limón y blanco. Todos con o sin moteado.
- Tricolores: Negro, blanco y fuego; hígado, blanco y fuego.
- Ruanos. Azul ruano, naranja ruano, limón ruano, hígado ruano, azul ruano y fuego, hígado ruano y fuego.
Personalidad del cocker spaniel inglés
El cocker spaniel inglés es un perro de energía media/alta por lo cual se recomienda para personas o familias que disfruten de hacer actividad al aire libre. Los problemas de conducta más habituales del cocker spaniel inglés son la destructividad, la persecución de animales pequeños, además de todos aquellos producto de una mala socialización, experiencias traumáticas, rutinas poco enriquecidas y más.
Cuidados del cocker spaniel inglés
El cocker spaniel inglés necesita recibir cepillados diarios en el pelaje y retirar manualmente el pelo muerto cada dos o tres meses. Para este último punto, se recomienda acudir a una peluquería canina. El baño puede realizarse de forma mensual o cada dos meses, dependiendo de la suciedad acumulada. Nunca es recomendable bañar a un perro demasiado seguido ya que puede ser perjudicial para su dermis. Si tenemos un cocker spaniel debemos saber que es fundamental prestar especial atención a sus orejas. Por su forma pueden acumular suciedad con facilidad, favoreciendo la aparición de ácaros así como también desarrollar infecciones u otitis. Deberemos limpiarlas con la frecuencia apropiada utilizando una gasa estéril y asegurarnos de que se sequen correctamente después del baño. Un cocker necesitará realizar actividad física moderada a alta de forma diaria. Sin embargo, es una gran opción mantener a estos grandes cazadores entretenidos con actividades de olfato dentro de casa. Esto no solo los cansará sino que les permitirá expresar una de los comportamientos típicos de la raza y la especie: usar la nariz para encontrar cosas.
Salud del cocker spaniel inglés
El cocker spaniel inglés es susceptible a sufrir varias enfermedades hereditarias. Entre las enfermedades más frecuentes del cocker spaniel inglés encontramos:
- Atrofia progresiva de retina
- Cataratas
- Glaucoma
- Displasia de cadera
- Nefropatía familiar
- Cardiomiopatías
Es fundamental realizar visitas regulares al veterinario, cada 6 o 12 meses, seguir correctamente el calendario de vacunación del perro, así como las desparasitaciones periódicas, y darle una buena alimentación acorde a las necesidades particulares del individuo. Si nuestro cocker spaniel goza de buena salud general, puede llegar a vivir entre 12 y 15 años.