¿Sabés cómo jugar con un cachorro correctamente? Adoptar un cachorro es una idea maravillosa, siempre y cuando tengamos en cuenta todas las responsabilidades que ello conlleva. Durante sus primeros meses de día los cachorros lloran, rompen, hacen sus necesidades en cualquier lado,muerden y demandan atención constante por lo que será nuestra obligación hacernos cargo de una educación adecuada para que estas conductas no perduren en el tiempo. Sin embargo, tenemos que tener en cuenta que para exigirle algo a un cachorro antes tenemos que asegurarnos de satisfacer correctamente todas sus necesidades. Los perros necesitan el juego dentro de sus rutinas, y más aún los cachorros.
Durante los primeros meses y vida y la juventud, los perros suelen tener mucha energía que debe ser canalizada de forma correcta. Una de las formas a través de la cual el perro puede descargar energía es jugando con nosotros. Si bien jugar con un perro parece una tarea bastante simple, no siempre lo es y son muchos los errores que pueden cometerse llevando a cabo esta actividad. A continuación, les daremos una serie de recomendaciones a tener en cuenta a la hora de jugar con un cachorro.
A qué puedo jugar con mi cachorro
Son diversos los juegos que podemos hacer con nuestros cachorros. Entre los juegos más recomendados para hacer con nuestros pequeños amigos peludos se encuentran:
Jugar a buscar y traer la pelota con mi perro
El juego de buscar y traer la pelota es una buena alternativa para que nuestro cachorro gaste energía dentro de casa. Además, es una excelente oportunidad para que practiquemos algunas cuestiones de obediencia con el animal. Podemos practicar el soltá, el vení y el sentado: vamos a pedirle al cachorro que se siente antes de tirarle la pelota y solo una vez que lo haga, la lanzaremos. Cuando el cachorro tenga la pelota en su poder, vamos a aprovechar para practicar el venir al llamado diciendo su nombre con un tono amigable, y moviéndonos en sentido contrario al perro. Finalmente, una vez que el cachorro nos trae el juguete vamos a practicar el “soltar” en principio intercambiando el objeto por algo de valor como por ejemplo un trocito de comida rica, el cual utilizaremos a modo de premio. Una vez que el perro ya sepa el solta, solo lo premiaremos volviendo a tirar la pelota. Si bien el jugar a buscar y traer la pelota es una buena alternativa para cansar a nuestro perro, recomendamos no abusar de esta modalidad de juego. Muchos perros terminan por obsesionarse con que les lancen juguetes para buscar y esto no es saludable. Recomendamos moderar el uso de esta forma de juego.
Jugar a tironear de una soga con un cachorro
El jugar a tironear de una soga con nuestro cachorro puede ser muy beneficioso para él. Este tipo de juegos son excelentes para satisfacer sus necesidades de presa ya que simula el movimiento de desgarrar aquello que han cazado. Si bien esta modalidad es excelente para construir y fortalecer un vínculo con nuestro cachorro, recomendamos ser muy cuidadosos. No debemos ser demasiado brutos a la hora de jugar con nuestro pequeño amigo canino ya que podemos lastimarlo, generar un recuerdo negativo de este tipo de situaciones y que en consecuencia el perro no quiera volver a jugar con nosotros. Debemos sostener el juguete en tensión y dejar que sea el perro quien haga la fuerza. Es fundamental que durante el juego el animal siempre pueda ganar el juego, de lo contrario va a frustrarse y a optar por no participar de este tipo de actividades con nosotros. Es recomendable que tengamos un juguete especial con el cual juguemos a nuestro perro a tironear para que no pierda nunca el interés en el. Con cachorros, es fundamental elegir sogas de materiales blandos que no dañen sus encías.
Juegos no recomendables con cachorros
Jugar con las manos con nuestro cachorro
El jugar con las manos con nuestros cachorros está prohibido. Si le enseñamos al perro a que juegue a mordernos será realmente difícil que podamos controlar su mordida cuando sea mayor. Desde que el perro es cachorro tiene que aprender que la forma de interactuar o jugar con nosotros no es a través de la mordida. De lo contrario, vamos a tener un adolescente/adulto que puede llegar a lastimarnos seriamente en una sesión de juegos.
Jugar a perseguir al cachorro
Este juego puede parecer divertido pero puede ser el generador de muchos problemas. Un perro que aprende que escapar de su tutor es un juego, tendrá muchos problemas para responder al llamado en la calle. Si queremos jugar a la persecución, siempre es el perro quien nos sigue a nosotros y no al revés.
El jugar como parte de la rutina del cachorro
Recomendamos establecer 3 o 4 momentos de sesiones de juego al día de no más de 5 minutos. El objetivo es que el perro no llegue hasta el punto del agotamiento, sino que se quede con ganas de volver a jugar con nosotros más tarde. Es fundamental jugar con nuestros cachorros de forma diaria tanto para que gasten energía como también para ir desarrollando y fortaleciendo un vínculo con ellos. Si tenés dudas sobre cómo jugar con un cachorro no dudes en consultar a un especialista en comportamiento.