Te preguntaste alguna vez ¿Cómo me acerco a un perro desconocido? A la hora de hacerlo, debemos ser muy cautelosos. No sabemos de dónde proviene el perro, si ha sido maltratado, si está asustado y se siente amenazado por nuestra presencia o incluso si está lastimado y su situación de vulnerabilidad lo hace ponerse a la defensiva.
Un perro desconocido puede sentirse amenazado ante nuestra presencia y más aún si yo me acerco En situaciones donde un perro se siente amenazado pueden ocurrir varias cosas:
- Que el perro intente huir, lo cual será perjudicial si estamos intentando ayudar a un perro ya que puede generar una situación muy peligrosa o cuando mucho estresante.
- Que el perro se quede inhibido en el lugar, lo cual denota una situación de estrés muy elevado.
- Que el perro intente atacarnos por vernos como un potencial peligro.
Como no sabemos si el perro desconocido es amigable o si se encuentra asustado ante nuestra presencia, es necesario tomar todos los recaudos posibles para acercarnos.
Debemos tener en cuenta que un perro desconocido es un perro del cual no tenemos posibilidad de conocer su historial. Por ejemplo, si nos encontramos frente a un animal que no ha realizado una adecuada socialización es probable que la presencia de un humano a quien no conoce lo ponga bastante incómodo o hasta lo asuste. Y si es un perro que ha sufrido experiencias traumáticas como maltrato por parte de humanos, es muy probable que el animal haya generalizado el miedo a todos los miembros de la especie.
Intentar determinar el estado emocional del perro
Para acercarme a un perro desconocido es necesario intentar determinar en qué estado emocional se encuentra el animal. Si bien debemos tomar recaudos sea cual sea el caso, no es lo mismo un perro paralizado por el miedo que uno que se acerca a nosotros de forma voluntaria y amigable. Para poder determinar esto, es muy importante prestar atención a su lenguaje corporal y a vocalizaciones si es que las hay. Los perros no pueden hablar nuestro idioma pero si pueden expresar como se sienten a través de diferentes señales. Nuestra tarea y responsabilidad es poder leerlas de manera correcta y en base a ello determinar cuál es la mejor estrategia a tomar en cada caso. Un perro que está asustado o incómodo ante nuestra presencia puede darnos señales como:
- Orejas hacia atrás
- Cola baja o entre las patas
- Bostezar
- Girar la cabeza o el cuerpo
- Apartar la mirada
- Agacharse y encoger el cuerpo
- Quedarse Inmóvil
- Temblar
- Relamerse
- Ladrido acompañando estas señales
Si notamos algunas de esta señales en un perro desconocido, es recomendable ser muy cautelosos a la hora de acercarse.
Por otro lado, un perro desconocido amigable puede darnos señales como:
- Postura corporal general relajada
- Acercarse a nosotros de manera amistosa
- Mover la cola junto con el cuarto trasero
- Intentar olfatearnos, siempre que su postura corporal general sea relajada
Cómo me acerco a un perro desconocido
Teniendo en cuenta todo lo dicho anteriormente, les detallaremos una serie de recomendaciones y pasos a seguir para acercarse a un perro que no conocemos. Es muy importante no apresurarse a pasar de un paso al otro ya que puede traer consecuencias irreparables en esa situación. Lo que buscamos aquí es asociar nuestra presencia con algo positivo y agradable.
1- En primer lugar es muy importante no acercarnos nosotros al perro ni hacer movimientos bruscos que puedan asustarlo o alterarlo. También debemos evitar mirar al perro a los ojos ya que suele ser una actitud que los pone bastante incómodos..
2- Lo ideal en estas situaciones es tener algo de comida que resulte motivante para el perro. Vamos a comenzar a arrojar pedacitos de comida al suelo y esperar a que el animal los busque. Si notamos que se siente cómodo con la situación podemos de a poco ir acortando la distancia en la que arrojamos los premios hasta que tenga que acercarse a nosotros para acceder a la comida.
3- Si no notamos ninguna señal de incomodidad o estrés en el perro podemos proceder a ofrecerle comida de nuestra mano. Es muy importante no adelantarnos en cada paso. El perro debe ser siempre quien tome la iniciativa de avanzar hacia nosotros.
4- Si el perro se deja tocar, debemos hacerlo con movimientos suaves siempre sobre el lomo, nunca en la cabeza del perro. Si notamos que el perro está cómodo podemos continuar dándole premios mientras suavemente acariciamos el lomo. Ante la mínima señal de incomodidad, retiramos la mano inmediatamente sin realizar movimientos bruscos que puedan alterar al perro. Podemos por el contrario tirar algunos pedacitos de comida al suelo para que el cerebro del perro continúe haciendo asociaciones de nuestra presencia con cosas buenas.
Queremos remarcar la importancia de ser sumamente cautelosos a la hora de realizar este proceso. Si no estoy seguro de cómo me acerco a un perro desconocido es ideal consultar con un profesional, para garantizar tanto la seguridad del animal como la nuestra.
